jueves, septiembre 20, 2012
Los Goonies
Tenía que caer. Si en este blog se han tocado (y se tocarán) clasicazos de los 80, Los goonies debían aparecer tarde o temprano.
Producida por Spielberg y dirigida por Richard Donner. Parece mentira, pero 30 años después todavía me encuentro por la vida gente que se piensa que la dirigió el director de Tiburón. Es para hacérselo mirar.
Sin duda los 80 fueron la época dorada de Steven. Dirigió los 3 primeros Indiana Jones (los buenos), E.T. El extraterrestre, y produjo Gremlins, Regreso al futuro, El secreto de la pirámide, El chip prodigioso... películas espectáculo que sabías que te lo ibas a pasar pipa. Es más, tal era su estatus y lo que vendía su nombre, que no importaba nada quien fuese el director de la película, lo que de verdad llenaba de culos las butacas de los cines era el "Steven Spielberg presenta".
Y parece mentira que el director fuese Richard Donner, que si bien encadenó un buen puñado de éxitos con La profecía, Superman o Arma letal, fue entrar en los 90 y comenzar el ocaso de su carrera con Asesinos (sí, la de Sly y Banderas) o Timeline.
La cuestión es que se conjugaron un montón de factores, todos ellos en gracia. A los dos implicados antes mencionados hay que añadir a Chris Columbus en el guión. El luego director de Solo en casa o los primeros Harry Potter, que en aquella época estaba en nómina de Spielberg, escribiendo Gremlins o El secreto de la pirámide, se marcó un tanto al coger una idea del director de Jurassik park y convertirla en un guión que dejaría boquiabiertos a toda una generación de chavales que 25 años después serían capaces de decir "chocolate" con la misma voz que Sloth o hacer el super meneo.
Recuerdo perfectamente haberla ido a ver al cine en su estreno, en los desaparecidos desde hace décadas Versalles, para luego, esa misma noche, verla comodamente en VHS. Ya saben, cosas de la piratería de los 80, que existir existía.
Me flipaba mucho el detalle que los personajes dejan entrever que ya han tenido más aventuras, como si la película fuese un secuela. También me traía loco eso de que se llamasen los Goonies. ¿Qué quería decir Goonies? Claro, con el tiempo, siendo más crecidito, ya asociaba eso de que vivían en los muelles de Goon.
Otra cosa que me traía de cabeza: todos nos dimos cuenta que cuando hablaban con Rosalita (Lupe Ontiveros, que precisamente murió en julio de este verano), la chacha de la madre, y nos colocaban esos subtítulos quemados en pantalla en inglés había gato encerrado. Rosalita no tenía precisamente pinta de italiana. Luego, cuando te la ponían en Tv3 en catalán (o quien la viera en VOSE), veías que realmente hablaba en castellano y todo era una excusa del guión para que Bocazas pudiese ir traduciendo el mapa de Willy el tuerto. Pero claro, no podían respetar el original y se tuvieron que sacar de la manga lo del italiano. ¡Pero si lo podían haber hecho perfectamente con el portugués, que cuadraba más!
¿Recuerdan lo de los Calvin Klein y los Levis en Regreso al futuro? Pues aquí lo mismo. En la traducción nos quedamos sin Motown, Janucá, o que el vómito que tira Gordi en un cine no es real, si no que lo prepara él; o que Troy (luego director de Burlesque) realmente no pide ligarse a Andy en el pozo de los deseos, si no que, directamente, se la quiere tirar.
Los Goonies tuvo un éxito moderado, los 20 millones de presupuesto se convirtieron en 60. Que si bien era una cifra a tener en cuenta, quedaban lejos de los 160 recaudados por Gremlins o los más de 300 de Regreso al futuro, por poner un par de producciones de Spielberg en la época.
Seguramente eso hizo que las aventuras de Gordi, Bocazas y compañía se quedasen en un único film.
Aun y así, y que la crítica fue bastante durilla con ella, la fama de la película propició algunas producciones que intentaban subirse al carro de aventuras juveniles: Exploradores, El secreto del lago, El secreto de la piramide, Cuenta conmigo, El vuelo del navegante, Una pandilla alucinante... y hace algunos años hubo algún film que buscaba revivir aquellos films como El hijo de Rambow o, más recientemente, Super 8.
Pero el tiempo ha ido dándole un estatus de culto al film y llevamos muchos años oyendo eso de la secuela. Algunos hablan maravillas de la idea de coger a treinteañeros y ponerlos en medio de aventuras juveniles, todo muy del rollo Spielberg de "recuperemos el espíritu infantil y la infancia perdida a lo Peter Pan", y a otros les interesa más el que metan el componente de gente acabada que tiene sus vicios con el JB o el caballito blanco y la trapagaperras al lado. Pero fuera como fuese, al final, en cuanto hay noticias de este nuevo proyecto, se acaba confirmando que no se hará.
Lo que mucha gente no recuerda es que ya hubo una secuela. Bastarda pero secuela al fin y al cabo. Todo ello en el mundo de los videojuegos, claro. De la película salió un juego de la mano de Datasoft para los ordenadores de la época (Atari 800, Commodore 64, Spectrum, Amstrad), que era del estilo Lost vikings o Lemmings, donde teníamos que ir alternando entre los chavales, cada uno con una cualidad, para poder ir pasando las fases.
Konami lanzó una versión para Nes que nunca salió de Japón, que era el clásico plataformas, tan en boga en aquella época, donde manejamos a Mikey, que ha de rescatar al resto de sus compañeros. La compañía japonesa también sacó una versión de este juego para MSX, que si bien era el mismo estilo de juego, modificaron los niveles y aumentaron la dificultad hasta límites extremos.
Y por fin, en 1987, apareció en la Nintendo 8 bits: The Goonies 2. The Fratelli's Last Stand. Programado también por Konami, sigue los patrones del anterior juego, pareciendo más un remake que una secuela, añadiéndole toques de exploración y utilización de objetos. De la misma manera llevamos a Mickey que, ataviado con un yo-yo como arma, ha de volver a rescatar a sus compinches y a una sirena llamada Annie (WTF????). Lo más llamativo es que en determinados momentos la vista cambia a primera persona cuando entramos en algunas habitaciones.
Pero no se vayan que aun hay más. De la misma forma que actualmente nos podemos encontrar un Kingdom hearts, que es un cruce entre el mundo de Square y Disney, a finales de los 80 Konami lanzó WaWai World, un crossover entre varias de sus sagas como Castlevania, TwinBee o Gradius, entre otros. Y, por supuesto, aprovechando que todavía conservaban los derechos de la película aquí reseñada pues volvieron a echar mano del bueno de Mickey y usaron una fase que transcurría en el barco de Willie el tuerto y bajo las catacumbas.
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6 comentarios:
A mí me gustó desde que la vi en el cine, y me ha seguido gustando en cada revision.
De hecho ahora la veo con mis hijos y nos lo pasamos pipa. Excelente entrada.
Opino igual, la he ido revisando cada 2 o 3 años y la sigo disfrutando a tope. Creo que es una de esas películas que, pese a estar enfocadas a un público mayoritariamente juvenil, no trata a los chavales como idiotas, y eso hace que se pueda disfrutar a cualquier edad. Además que esteticamente se mantiene muy bien, el hecho de contar con efectos "analógicos" le ayuda. Dentro de 10 o 15 años muchas de estas pelis que llevan todo ese cúmulo de efectos digitales serán sonrojantes. Y eso que hay muchas que los son desde el día de su estreno.
Aún recuerdo cuando la vi por primera vez, en una reposición televisiva a la hora de la siesta (no había nacido cuando se estrenó) y esa mezcla de ternura y repelús que me daba Sloth. El meneo se llama "Truffle Suffle" y para dar apoyo a la realidad de que los Goonies se transformaron en película de culto, hay hasta una tienda de camisetas ochenteras con ese nombre.
Como sigas haciendo reseñas tan rematadamente buenas jamás me atreveré a intentarlo yo, y mi blog estará abocado al fracaso y a la narración de subnormalidades personales.
Hahahaha que exagerada. Estoy deseando leer esas reseñas tuyas. A ver para cuando!!!!
Pues a mi los goonies nunca me ha gustado, no me gustó entonces y no me gusta ahora, igual sino le dieran tanta fama y tanto bombo la vería como una peluiculilla de sesión de tarde, pero a mi me parece que esta sobrevalorada, si es que además, no pasa nada en toda la peli...nada...
Pues a mi los goonies nunca me ha gustado, no me gustó entonces y no me gusta ahora, igual sino le dieran tanta fama y tanto bombo la vería como una peluiculilla de sesión de tarde, pero a mi me parece que esta sobrevalorada, si es que además, no pasa nada en toda la peli...nada...
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