domingo, mayo 31, 2020

Festival de trailers (CLX)



The Mod Squad. Escuadrón oculto (The Mod Squad, 1999) de Scott Silver. Con Claire Danes, Omar Epps, Giovanni Ribisi, Dennis Farina y Josh Brolin.



Run, perseguido por todos (Run, 1991) de Geoff Burrowes. Con Patrick Dempsey, Kelly Preston, David Cameron, Gerry Davey, Ken Pogue y Sean McCann.



Black Dog (Black Dog, 1998) de Kevin Hooks. Con Patrick Swayze, Randy Travis, Meat Loaf, Stephen Tobolowsky, Charles S. Dutton y Brenda Strong.



Duro de matar (Honfgan Qu, 1995) de Stanley Tong. Con Jackie Chan, Anita Mui, Françoise Yip, Bill Tung, Marc Akerstream y Garvin Cross.



Solo, el destructor (Solo, 1996) de Norberto Barba. Con Mario Van Peebles, Barry Corbin, William Sadler, Jaime Gomez, Demian Bichir, Seidy Lopez y Abraham Verduzco.

domingo, mayo 24, 2020

Festival de trailers (CLIX)



Godzilla (Godilla, 1998) de Roland Emmerich. Con Matthew Broderick, Jean Reno, Maria Pitillo, Hank Azaria, Doug Savant, Kevin Dunn, Michael Lerner y Harry Shearer.



Viaje al mundo perdido (The People That Time Forgot, 1977) de Kevin Connor. Con Patrick Wayne, Doug McClure, Sarah Douglas, Dana Gillespie, Thorley Walters y Shane Rimmer. 



Tiburón. Duelo a muerte (Sangue negli abissi, 1990) de Raffaele Donato. Con Frank Baroni, Cort McCown, Keith Kelsch, James Camp y Tody Bernard. 



Parque Jurásico (Jurassic Park, 1993 de Steven Spielberg. Con Sam Neill, Laura Dern, Jeff Goldblum, Richard Attenborough, Ariana Richards, Joseph Mazzello, Wayne Knight y Samuel L. Jackson.



Parque Jurásico III (Jurassic Park III, 2001) de Joe Johnston. Con Sam Neill, William H. Macy, Téa Leoni, Alessandro Nivola, Trevor Morgan, Michael Jeter y Laura Dern.



Bonus track


martes, mayo 19, 2020

Callejón infernal

Callejón infernal, Damnation Alley, Jack Smight, George Peppard, Jan-Michael Vincent

Los USA y la Unión Soviética se intercambian una ristra de misiles, haciendo que el planeta quede hecho un yermo. Además, las explosiones han hecho que el eje de la Tierra se haya movido, con lo que hay radiación solar y muchos insectos, como los escorpiones, han mutado a tamaños gigantescos.

Un grupo de militares viven en una base hasta que por causa de un incendio tienen que abandonarla. A bordo de un vehículo blindado detectan una señal de radio que proviene de Nueva York, donde irán con la esperanza de encontrar más supervivientes.


Callejón infernal, Damnation Alley, Jack Smight, George Peppard, Jan-Michael Vincent

Cuesta de asimilar, pero Callejón infernal iba a ser el gran estreno en el 77 por parte de Fox, mientras que otra de sus producciones, una tal Star Wars, debía ser una más y de la que no tenían buenas expectativas. Como sabe todo el mundo, Star Wars no solo fue el éxito del año, si no que ayudó asentar el fénomeno blockbuster que había iniciado Tiburón y dio pie a la franquicia que más dinero movería.

En aquellos 70, Alan Ladd, Jr. empezaba su andadura como presidente de la Fox y sería precisamente Callejón infernal el primer proyecto al que daría luz verde. Para llevar las riendas de la producción eligió a Jack Smight, que había sido su representado cuando trabajaba en la agencia CMA y venía de unos cuantos éxitos económicos consecutivos con Aeropuerto 75 y La batalla de Midway.
 

Callejón infernal, Damnation Alley, Jack Smight, George Peppard, Jan-Michael Vincent

Después de recibir el guión, que estaba basado en el relato de Damnation Alley de Roger Zelazny (aquí editado en 1978 por Dronte en su antología Nueva dimensión nº 99 con el título El callejón de la muerte), firmado por Lukas Heller (Doce del patíbulo) y con aprobación del autor, sería reescrito por Alan Sharp (Clave: omega)
Smight quiso a Nick Nolte como protagonista, que acababa de despuntar en Hombre rico, hombre pobre, pero este rechazó la propuesta porque encontró el guión horrible. Nick Nolte 1 - Jack Smight 0. 
Aprovechando su amistad con George Peppard, al que ya había dirigido en series de televisión y El tercer día, y que en la época estaba en plena decadencia con problemas alcohólicos y obligado ha aceptar muchos papeles para poder pagar a su ex mujer, le ofreció el papel. También se contó con Jan-Michael Vincent, Dominique Sanda, Paul Winfield y un post adolescente Jackie Earle Haley

Además, Smight procuró rodearse de gente con la que ya había trabajado. Al mentado Peppard se unió el director de fotografía Harry Stradling Jr. y Jerry Goldsmith en la banda sonora.

Para ubicar el rodaje en una zona que tuviera las características de haber recibido una bomba nuclear se eligió Valley of Fire, muy cerca de Las Vegas, donde precisamente hacía noche el equipo. Así que no era extraño que parte de sus integrantes pasara la noche en bares, casino o clubs de streptease. Una vez terminado las escenas que rodaron allí, el equipo se trasladó a Flagstaff, Arizona, lugar en el que hay un cráter de más de un km de diámetro producto del impacto de un meteorito.

Callejón infernal, Damnation Alley, Jack Smight, George Peppard, Jan-Michael Vincent

Conforme fue avanzando el rodaje el director se dio cuenta que el equipo necesario para algunos efectos no estaban listos y el presidente de Fox no hacía otra cosa que apretarle para que acabase el rodaje. Muchos de los trucajes que estaban previstos no funcionaron, como los escorpiones del inicio del film, que estaba planeado que fuesen unos muñecajos gigantes. Así que se tuvieron que arreglar en post producción. Pero para sorpresa de su director, el presupuesto que les quedaba se había evaporado por arte de magia. Años más tarde se enteraría que una cuarta parte del dinero que le habían asignado sería traspasado a Star Wars, lo que hizo que los escorpiones gigantes fueran hechos con unos terribles chromas.

Todo esto propició el retraso de la producción y Star Wars se estrenaría en mayo de 1977 con su consiguiente éxito. Así que la Fox se encontró con una patata caliente como la de Callejón infernal, que había costado 17 millones y palidecía ante el espactáculo de George Lucas, pese a que había costado 11.

La única solución que encontró la Fox fue descartar el corte fnal de Smight y hacer uno nuevo que enfatizara todo el tema tecnológico del vehículo (que había costado 300 mil dólares) y añadir efectos en los cielos para simular una eterna Aurora boreal.

Callejón infernal, Damnation Alley, Jack Smight, George Peppard, Jan-Michael Vincent

Finalmente Callejón infernal se estrenaría en otoño de 1977 en USA (aquí tardaría un año en llegar) y, además de ser vapuleada por la crítica, fracasó en taquilla con una recaudación que no llegaba ni a la tercera parte de lo que costó.

Callejón infernal, Damnation Alley, Jack Smight, George Peppard, Jan-Michael Vincent
Que las comparaciones son odiosas ya lo sabemos, y más cuando comparamos la película de Luke Skywalker y compañía con Callejón infernal, que parece una serie B de los años 60, con mucho desierto y efectos de baratillo o imágenes de explosiones nucleares recicladas de algún documental. Ni siquiera se le puede salvar porque cuente una historia increible. Casi parece más típica de una serie de la época en la que en cada capítulo los protagonistas llegan a una zona, viven una aventurilla y siguen su rumbo. Ni a los que crecimos viendo El equipo A nos salva la tarde el cogernos a la carta George Peppard (que aquí luce bigotillo, aunque en la carátula del VHS se la ventilaron).
Quizá lo único remarcable sea que se avanzó a las películas post-apocalípticas que puso de moda Mad Max II. ¿Pero eso es una virtud?

domingo, mayo 17, 2020

Festival de trailers (CXLXVIII)



Ciudad peligrosa (Blue City, 1986) de Michelle Manning. Con udd Nelson, Ally Sheedy, David Caruso, Paul Winfield, Scott Wilson, Anita Morris, Luis Contreras y Julie Carmen.



El límite de la ley (U.S. Marshals: Waco & Rhinehart, 1987) de Christian I. Nyby II. Con Charles C. Hill Jr., Carmen Argenziano, Alma Beltran y Creed Bratton.



Grupo antiterrorista (C.A.T. Squad, 1986) de William Friedkin. Con Joseph Cortese, Jack Youngblood, Steve James, Patricia Charbonneau, Sam Gray, Barry Corbin y Eddie Velez.



Grupo antiterrorista II (C.A.T. Squad: Python Wolf, 1988) de William Friedkin. Con Joseph Cortese, Jack Youngblood, Steve James, Deborah Van Valkenburgh y Miguel Ferrer.



No despertar a un policía que duerme (Ne réveillez pas un flic qui dort, 1988) de José Pinheiro. Con Alain Delon, Michel Serrault, Xavier Deluc, Patrick Catalifo y Raymond Gérôme.

martes, mayo 12, 2020

Dollman (y secuela)

Dollman, Charles Band, Albert Pyun, Full moon, Tim Thomerson

Brick Bardo es un expeditivo policía en el planeta Arturos que le importa bien poco la mala reputación que tiene entre sus compañeros. Pero un día es capturado por Doch Spru, un maleante al que el policía ha ido desmembrando en sus diferentes enfrentamientos y ahora es solo una cabeza flotante. Después de unos cuantos disparos y muertes, Spru consigue escapar en una nave espacial, siendo perseguido por Bardo atravesarán una ¿brecha espacial? que les hará llegar a la Tierra, concretamente a un barrio del Bronx donde sus vecinos son asediados por bandas de delincuentes. Su problema es que en este planeta son 6 veces más pequeños que el resto de personas.
 
Dollman, Charles Band, Albert Pyun, Full moon, Tim Thomerson

Albert Pyun será toda la vida emparentado con la Cannon y las películas con cyborgs que pasan en descampados (aunque él te jurará y perjurará que eso es un futuro postapocalíptico). Es por eso que cuesta un poco meterlo en el universo de Charles Band en una época que ya había liquidado su Empire y estaba con su Full Moon, donde facturaba productos un poco más friendly ya que se había asegurado un negocio tan bueno como el que la Universal le distribuyese sus películas en VHS. Para Pyun era uno de los pocos salvavidas que quedaban, pues la serie B que en los 80 tenía cabida en los cines había quedado desterrada al mercado videográfico en los 90, cuando los presupuestos se rompieron y había excesiva diferencia entres las grandes producciones de las majors y el resto. 

En un principio Band ideó la historia de un científico que es víctima de un experimento y acababa encogido, teniendo que lidiar con insectos y gatos. Evidentemente la influencia de Cariño, he encogido a los niños era tan evidente que entraban de lleno en el pantanoso terreno del plagio y sería Pyun el que propondría cambiar el argumento y hacer una especie de Harry el sucio miniaturizado. Se ofreció a dirigirla gratis siempre que se le permitiese cambiar la historia y supervisar el montaje final, a lo que Band accedió encantado. Pero después del rodaje el director vio como no le permitieron controlar el corte final, de ahí que acabará bastante decepcionado con la experiencia y no volvería a trabajar con Band. Además, rodó de forma consecutiva a esta Arcatron, y entre las dos se gastaron menos de 700 mil dólares. Así que imaginate, el clásico caso de la factoría Band, donde conceptos más o menos interesantes se van al traste porque requerían bastante más inversión para unos efectos especiales minimamente competentes.

Dollman, Charles Band, Albert Pyun, Full moon, Tim Thomerson

Y es que Dollman cae en saco roto cuando se trata de sacar sus cartas en lo visual y hacernos creer ese mundo llamado Arturos y el contraste del protagonista en un mundo de gigantes. Parece que la cosa empieza bien cuando vemos una panorámica de ese mundo extraterreste con una maqueta de edificios y un matte painting futurista y unos cochecitos de juguete que intentan hacernos creer que son naves voladoras. Vale, estos detalles son demasiado ochenteros pero tienen su encanto y los compramos sin despeirnarnos. Aun y así tengo sospechas que ese plano puede pertenecer alguna película anterior a Band. Pero enseguida nos vamos al terreno de Pyun cuando nos pone en antecedentes de Brick Bardo y lo tenemos liberando a unos rehenes (¡una familia de gordos!) en una especie de fabrica o almacén. Luego lo tenemos enfrentado al villano de turno en un maldito descampado con una fábrica demolida en su espalda. ¿Pero no estábamos en un planeta futurista con grandes edificios que parecen de cristal y coches voladores? Nada. Hemos sido engañados. 
Luego tenemos el ya clásico recurso de, por ejemplo, Masters del Universo, llevar la acción a nuestros tiempos con el consiguiente ahorro de decorados, vestuario y lo que venga. "Al menos nos divertiremos con el contraste de tamaños", pensamos. Pero no. No hay un solo efecto/trucaje de perspectiva forzada o decorados construidos a escala. Nada. Todo se reduce a contrapicados para nuestro protagonista cuando va por ¡un descampado! y el clásico plano contra plano para que los actores no compartan encuadre. Lo máximo que hacen es grabar al protagonista sobre un chroma la mar de casposo y tira que te vas. 
Lo máximo que podemos salvar es al villano, una cabeza flotante que más o menos se ve correcto pero siempre notaremos el truco que al no estar totalmente dentro de plano.

Dollman, Charles Band, Albert Pyun, Full moon, Tim Thomerson

Dollman es un extraño pastiche que en su idea original suena a producto de aventuras simpáticas para toda la familia, pero que luego te encuentras que tiene alguna que otra salvajada con explosiones de miembros que te dejan a cuadros. Esa fue una de las razones por las que Pyun tuvo problemas con Band, que estaba más interesado en una película para toda la familia. Por lo demás no deja de ser una mezcla del mentado Harry Callahan, El justiciero de la noche y Nuestros maravillosos aliados.
 
Dollman, Charles Band, Albert Pyun, Full moon, Tim Thomerson

El cast es tan malo como olvidable y solamente merece la pena mencionar a Tim Thomerson como Brick Bardo (este es un nombre recurrente en muchas películas de Pyun, en parte un homenaje a Joseph Bardo, tipo con el que coincidió en Vicious lips y que tuvo cierto recorrido en el cine exploit y porno como productor, guionista, director...). A Thomerson lo habrás visto en minúsculos papeles en centenares de pelis y series, pero igual será más recordado más por ser prota de la saga Trancers (también de Charles Band) o el hermano asesinado de Barry Allen en el piloto de la serie Flash, el relámpago humano. También tenemos a un jovencito Jackie Earle Haley, que muchos años después saltaría a primera línea como Rorschach en Watchmen y el fallido Freddy Krueger en el remake de Pesadilla en Elm street; y no puedo dejar de mencionar a Frank Doubleday como la cabeza flotante que quiere acabar con Brick Bardo. A Doubleday lo tienes en Asalto a la comisaría del distrito 13 y en 1997: Rescate en Nueva York haciendo de Romero.

La película no llega a los 80 minutos, y si le quitamos los títulos de crédito del inicio y del final (alargados hasta el infinito) la cosa se nos queda en unos escasos 70 minutos, cosa normal si resulta que el rodaje fueron 12 días. Todo ello ayudará a que no nos aburramos demasiado y se nos quedé la sensación de estar ante un fallido piloto para una serie noventera.


Dollman, Charles Band, Albert Pyun, Full moon, Tim Thomerson, Dollman contra los juguetes asesinos
Dollman contra los juguetes asesinos (Dollman vs. Demonic Toys, 1993). Ya sabemos como se las gasta Charles Band. Su época buena (los 80), donde facturaba cosillas con gracejo, pasó y ya poco le importaba sacar algo con cara y ojos y su única intención era facturar lo que sea, como fuera. O sea, un Roger Corman de baratillo que hacía pelis en un fin de semana para aprovechar un decorado que el lunes derruían o que pillaba fragmentos de diferentes de sus pelis y remontaba una "nueva". Y esta "secuela" (o quizá sea mejor decir crossover entre Dollman, Onda Alien y Juguetes asesinos) me temo que va por ahí. Atufa a cortos empalmados para llegar a una duración estándard y vendertelo como peli. Y lo de la duración tiene guasa. Dura exactamente 60 minutos, pero si le quitas los títulos de crédito iniciales y finales te quedas en unos tristes 50 minutos. Y espérate, que también se marcan un remember de la anterior película de Dollman, Muñecos asesinos y de Ondas Alien. ¿El resultado? Una película de apenas 45 minutos.
¿De qué va el asunto? Nuestro amigo Dollman va en busca de una chica llamada Ginger (escena recuperada de los post créditos de Ondas Alien) que ha sido reduciada por los extraterrestres. Paralelamente unos muñecos asesinos con vida se cargan a la gente de una fábrica de juguetes mientras una policía va tras ellos y acaba asociándose con la pareja miniaturizada para acabar con los muñecos.
Aquí tenemos un decorado que simula la encimera de una cocina gigante (me imagino que reciclado de otra peli de Band) e incluso una araña con efecto stop motion. Salvo eso poco que destacar en los efectos. Los muñecos son marionetas de esas que por debajo las articula una mano y alguno es un señor con una máscara de capgròs. Horrible como la propia película.
Además de Tim Thomerson, Tracy Scoggins y Melissa Behr repitiendo los roles de sus respectivas sagas, tenemos a Phil Fondacaro.

Las andanzas de Dollman no acabaron aquí. Ya en el nuevo milenio, cuando la mierda que facturaba Band ya no engañaba a nadie, tuvo que buscarse nuevas fórmulas para llenarse los bolsillos y editó una colección de cómics donde el minúsculo personaje se las veía con otros de la factoría Full Moon.

domingo, mayo 10, 2020

Festival de trailers (CXLXVIII)



La cacería del fugitivo (Chase, 1985) de Rod Holcomb. Con Jennifer O'Neill, Michael Parks, Robert S. Woods, Terence Knox, John Philbin, Kathleen York, J.E. Freeman, Cooper Huckabee y Richard Farnsworth.



Zona cero. Alerta nuclear (Ground Zero, 1987) de Bruce Myles y Michael Pattinson. Con Colin Friels, Jack Thompson, Donald Pleasence, Natalie Bate, Burnham Burnham, Simon Chilvers y Neil Fitzpatrick.



Sin vía de escape (Slamdance, 1987) de Wayne Wang. Con Tom Hulce, Virginia Madsen, Mary Elizabeth Mastrantonio, Harry Dean Stanton, Don Keith Opper y Adam Ant.



Juguete mortal (The Manhattan Project, 1986) de Marshall Brickman. Con Christopher Collet, John Lithgow, Richard Council, Robert Schenkkan, Paul Austin, Adrian Sparks, Curt Dempster y Robert Sean Leonard.
 


Carretera al infierno (The Hitcher, 1986) de Robert Harmon. Con C. Thomas Howell, Rutger Hauer, Jennifer Jason Leigh, Jeffrey DeMunn, John M. Jackson y Billy Green Bush.

domingo, mayo 03, 2020

Festival de trailers (CXLXVII)



Pasodoble (1988) de José Luis García Sánchez. Con Fernando Rey, Juan Diego, Antonio Resines, Caroline Grimm, Cassen, Mary Carmen Ramírez, Kiti Mánver, Juan Luis Galiardo y Pedro Reyes. 



Zapping (1999) de Juan Manuel Chumilla Carbajosa. Con Alberto San Juan, Natalia Dicenta, Paz Vega, Eduard Fernández, Guillermo Toledo, Idoia Bilbao y Alicia Cifredo.



Long-Play (1968) de Javier Setó. Con Gracita Morales, José Luis López Vázquez, Cristina Galbó, Tota Alba y Trini Alonso. 



La casa de los Martínez (1971) de Agustín Navarro. Con Julia Martínez, Carlos Muñoz, José Rubio, Florinda Chico, Mari Carmen Prendes, Rafaela Aparicio, Laly Soldevila, María Isbert, José Luis Coll, Teresa Hurtado, Luis Sánchez Polack, Alfonso del Real, Juanjo Menéndez, Manolo Gómez Bur, Sara Montiel, Teresa Gisbert, Gracita Morales, Ángel de Andrés, Tony Leblanc, Concha Velasco, Torrebruno, Natalia Figueroa, Alfredo Amestoy, Manolo Escobar, Paco Valladares, Simón Andreu y Mary Santpere.



Makinavaja. El último choriso (1992) de Carlos Suárez. Con Andrés Pajares, Jesús Bonilla, Mario Pardo, Pedro Reyes, Mary Santpere, Llàtzer Escarceller, Carmen Conesa, Boris Ruiz y Carles Canut. 



 Bonus track


jueves, abril 30, 2020

Sonámbulos

Sonámbulos, Stephen King, Mick Garris, Sleepwalkers,  Mädchen Amick, Brian Krause

Sónambulos es de esas películas que tienen a Stephen King detrás de la historia y que siempre he tenido en la recámara pero nunca acababa de dar el paso a visionarla. Más que nada por la mala fama que arrastra. Aunque visto de otro modo, ¿no le pasa eso al 90% de las adapataciones de King?

Finalmente le di la oportunidad y tengo que reconocer que tiene bastantes bondades y me hizo pasar un ratillo entretenido. ¿Quizá iba con las expectativas tan bajas que cualquier cosa me habría parecido salvable? Podría ser.


Sonámbulos, Stephen King, Mick Garris, Sleepwalkers,  Mädchen Amick, Brian Krause

El amigo Mick Garris ya se había pasado por estos lares. Y no es para menos, pues, junto a Frank Darabont, debe ser el que más adaptaciones de Stephen King ha dirigido. Pero más allá de eso no seré yo el que alabe sus cualidades fílmicas. En general tiene pocas cosas salvables: Critters 2 es pasables sin más, la mini serie de El resplandor es un horror en el peor de los sentidos, Quicksilver Highway es bazofia, Psicósis IV que igual la veo algún día... y el resto es para darle de comer aparte. Es por eso que me sigue asombrando que lo tengan en esos altares del terror junto nombres que sí han demostrados su buen hacer, y que posiblemente su mejor virtud sea la de ser un tipo que sabe camelarse al personal como ya vimos cuando se marcó aquel Masters of horror. No por casualidad la productora que se montó a principios de los 80 para amparar sus making of de La cosa o Los Goonies se llama With Nice Guy Productions. Al menos el tío lo tiene claro desde que empezó.

Sonámbulos es el primer guión cinematográfico que escribió King sin ser una adaptación de sus novelas/relatos. Al menos el primero que se realizó, ya que a finales de los 70 escribió The Shotgunners y Sam Peckinpah se interesó por él, pero pocos años después el director moriría y el proyecto quedaría en el limbo.


Sonámbulos, Stephen King, Mick Garris, Sleepwalkers,  Mädchen Amick, Brian Krause

Volviendo a Sonámbulos, contaba el propio King que la historia le vino a la cabeza a partir de una experiencia de su hijo Joe Hill. Siendo adolescente se quedó prendado de una chavalilla que trabajaba en el cine del pueblo, pero estaba angustiado por si recibía un rechazo. Eso fue el punto de partida para una historia que fue urdiendo King sobre si uno de los pretendientes de la chica no fuese el tipo perfecto que aparentaba.

Paramount se haría con los derechos del guión y contrató a Rupert Wainwright para que la dirigiese. El tipo, que era un habitual en la dirección de los videclips de MC Hammer y solamente había dirigido el telefilm Dillinger con Mark Harmon y Sherilyn Fenn, no acabó entendiéndose con King y salió del proyecto. Hay que apuntar que luego dirigió un Disney como Cheque en blanco y tuvo su incursión en el terror con Stigmata y el horripilante Terror en la niebla, remake milenial de la que tu ya sabes. Finalmente la silla de directo recayó en Garris cuando fue propuesto por el propio King después de ver Psicósis IV. 

 
Sonámbulos, Stephen King, Mick Garris, Sleepwalkers,  Mädchen Amick, Brian Krause

El film sería una producción tirando a modesta con un presupuesto de 15 millones de dólares y contando con una pareja de protagonistas más o menos reconocibles en la época: Brian Krause, que acababa de protagonizar el fracaso de Regreso al lago azul junto a Milla Jovovich; y Mädchen Amick, que estaba on fire por ser una de las protagonistas de Twin Peaks. Además teníamos a Alice Krige, la Morgana de El aprendiz de brujo; Glenn Shadix, el Otho de Bitelchús; y Ron Perlman, Hellboy. Además un montón de cameos: Mark Hamill, Joe Dante, Tobe Hooper, John Landis, Clive Barker y el propio Stephen King.  
 
Sonámbulos, Stephen King, Mick Garris, Sleepwalkers,  Mädchen Amick, Brian Krause

Un chico llamado Charles Brady y su madre se mudan a un pueblecito de esos idílicos. Allí Charles conoce a una compañera de clase de la que se enamora. Lo que ella no sabe es que Charles es un sonámbulo, seres felinos que transmutan en diferentes formas y se alimentan de la fuerza vital de las vírgenes. Su único punto débil son los gatos, que pueden ver su verdadero aspecto.
 
Sonámbulos, Stephen King, Mick Garris, Sleepwalkers,  Mädchen Amick, Brian Krause

Sonámbulos tiene algo muy bueno y es que va por faena. No se comen mucho la cabeza en presentar personajes ni su historia. Si a eso le añadimos que si le quitamos los títulos de crédito iniciales y finales apenas llega a los 80 minutos, nos queda un producto de rápido consumo que nunca llega hacernos mirar el reloj. Quizá el ir tan a barraca le pase factura porque podríamos decir que hay detalles de importancia en la trama que no s eexplica, como todo el origen de esos seres felinos o sus intenciones, que te las has de suponer. Aun y así, prefiero esto a que se alargue hasta la extenuación. También habría que ver si parte del material que se tuvo que cortar para que no fuese clasificada como exclusivamente para mayores de 17 años, se llevó parte de esa trama.

Uno de los platos fuertos serían sus maquillajes y efectos. Los primeros están más que correctos aunque tampoco matn demasiado el diseño del aspecto real de los sonámbulos. Por contra tenemos algún efecto digital que básicamente eran los tan de moda en la época morphing, que a día de hoy han perdido cualquier tipo de espectacularidad y son espantosos.


Sonámbulos, Stephen King, Mick Garris, Sleepwalkers,  Mädchen Amick, Brian Krause

En definitiva, Sonámbulos es como muchas de las adaptaciones de King en los 90, películas que no son las genialidades que se marcaron De Palma o Cronenberg una década antes pero que se quedan en algo entretenido sin demasiadas más pretensiones. Que ya es mucho.


domingo, abril 26, 2020

Festival de trailers (CXLXVI)



New Police Story (Xin jing cha gu shi, 2004) de Benny Chan. Con Jackie Chan, Nicholas Tse, Mak Bau, Kenny Wong, Winnie Leung, Eric Kwok, Deep Ng, Ken Lo y Tony Ho.



Naked weapon. Arma desnuda (Chek law dak gung, 2002) de Ching Siu-Tung. Con Maggie Q, Anya, Jewel Lee, Daniel Wu, Almen Wong, Marit Thoresen, Karine Kwok y Renee Nichole Rommeswinkel.



Nacer para morir (Cradle 2 The Grave, 2003) de Andrzej Bartkowiak. Con Jet Li, DMX, Anthony Anderson, Kelly Hu, Mark Dacascos, Gabrielle Union, Paige Hurd y Tom Arnold.



Fulltime Killer (Chuen jik sat sau, 2001) de Johnnie To y Wai Ka-Fai. Con Andy Lau, Teddy Lin, Takashi Sorimachi, Cherrie Ying, Simon Yam, Kelly Lin, Lam Suet y Rocky Lai.



El monje (Bulletproof Monk, 2003) de Paul Hunter. Con Chow Yun-Fat, Seann William Scott, Jaime King, Karel Roden, Victoria Smurfit, Marcus Jean Pirae, Roger Yuan, Mako y K.C. Collins.



Bonus track:


jueves, abril 23, 2020

La gran huida

la gran huida, dreamscape, 1984, dennis quaid, max von sydow, christopher plummer

Que la serie B o Z se sirviese de carteles llamativos para vendernos la moto era algo habitual, ya fuese en aquel grindhouse norteamericano o, ya en los 80, las carátulas de videoclub. Pero que lo hiciera una con un reparto de primer nivel era raro. 

la gran huida, dreamscape, 1984, dennis quaid, max von sydow, christopher plummerPorque cuando ves el cartel de La gran huida, firmado por el mismísimo Drew Struzan, la que te viene a la cabeza es que te vas a encontrar con un film de aventuras más en la línea de Indiana Jones, a lo que hay que señalar una traducción del título nada acertada. Quizá por eso en su pasó al videoclub nos llegó con un engendro de carátula diferente (aunque si ves la del DVD de Manga Films se te caen los cojones al suelo).

la gran huida, dreamscape, 1984, dennis quaid, max von sydow, christopher plummer

Un joven con poder psíquicos es reclutado por una empresa que ha construido un sistema para introducirse fisicamente en los sueños de las personas. Paralelamente el presidente de los EEUU tiene constantes pesadillas con una guerra nuclear, lo que hará que se ponga en manos de esta empresa para que le ayuden.
 

Si por algo destaca La gran huida es por un reparto muy apañado. Como protagonista absoluto un Dennis Quaid que venía de Tiburón 3 y todo indicaba que se acabaría convirtiendo en una super estrella en Hollywood, pero cuando ya estaba sacando la cabeza en el firmamento se las vio con El chip prodigioso que no funcionó lo bien que se le esperaba y fue perdiendo pistonada. Quaid está flanquado de Max Von Sydow, Christopher Plummer, David Patrick Kelly (el malo de The Warriors), George Wendt (el vecino fisgón de House), Eddie Albert (el abuelo cascarrabias de La montaña embrujada), Chris Mulkey (uno de los villanos de Twin Peaks) y Kate Capshaw (la mujer de Spielberg y que ese mismo año sería la pareja femenina de Harrisson Ford en Indiana Jones y el templo maldito).

En la dirección Joseph Ruben, que luego se especializaría en thrillers como El padrastro, Durmiendo con su enemigo o El buen hijo. Ruben también estaría detrás de un guión que firmaría junto a David Loughery (Star Trek V, Asalto al tren del dinero) y Chuck Russell que, además de ser productor, 3 años después dirigiría Pesadilla en Elm street 3, saga que se iniciaría el mismo año que La gran huida, con la que compartía todo el tema de meterse en los sueños.

Y apuntar que Roger Zelazny escribió el primer tratamiento basado en su novela El señor de los sueños, pero no aparece acreditado.

Se supone que el plato fuerte de la película son sus efectos especiales. Supervisados por Craig Reardon, que había estado en Poltergeist, En los límites de la realidad o en Los Goonies diseñando a Slooth, se han quedado exageradamente anticuados. Es cierto que hay un montón de técnicas diferentes (cromas, stop motion, maquetas, maquillajes, animatronics, rotoscopia...) pero se le nota que había demasiadas pretensiones para el presupuesto que manejaban.

la gran huida, dreamscape, 1984, dennis quaid, max von sydow, christopher plummer

La gran huida acaba siendo una mezcla de terror, thriller político y tecnológico, ciencia ficción... incluso tiene un momento de comedia con el tipo que tiene miedo que su mujer le ponga la cornamenta. Quizá por ello no supieron muy bien cómo venderla y el público no supo como tomársela. Aunque, ojo, que los paralelismos con la muy posterior Origen de Nolan son notables y llamativos.
Tampoco es de ayuda ciertos agujeros como el que apenas se profundiza en la máquina que es parte fundamental para entrar en los sueños o porqué el personaje protagonista no usa sus "poderes" para intuir por donde van a salir los malos.
Finalmente sería considerada un fracaso, pese a ser un film de producción independiente (aunque la distribución corrió a cargo de la Fox), que apenas contó con 6 millones de dólares en su presupuesto. ¿Su recaudación? 12 millones en suelo yankie.

Sin ser un castigo, su visionado es hasta cierto punto aguantable. Y si aguantamos veremos recompensada nuestra paciencia con los últimos 10 minutos en donde veremos un festival de efectos en su climax final. Vale que esos cromas cantosos son un poco risibles (por no hablar de su acartonado stop motion) pero la idea de un escenario totalmente post-nuclear con un tren lleno de zombies mola y mucho (aunque más en su concepto que en la ejecución).

Si después de casi 40 años sigue sin ser un título con demasiado culto por algo será.