jueves, mayo 26, 2011

Este chico es un demonio (y secuelas)

Este chico es un demonio, John Ritter
Que curioso es como es capaz de afectar el tiempo a las películas. En su momento Este chico es un demonio me parecía divertidísima, llena de mala leche y sin las concesiones yankis de Solo en casa, de la cual, aunque parezca lo contrario, no es un exploitation.
Vista la otra noche me ha parecido floja y con sus dosis de moralina demasiado babeante.

Este chico es un demonio, John Ritter
La historia va de un matrimonio que no puede tener hijos. La mujer, que es la clásica petarda que solamente piensa en comprarse modelitos, quiere a toda costa un hijo porque así podrá formar parte del grupo de madres del vecindario, así que acaban adoptando un chaval que es un auténtico cabronazo que tiene martirizadas a las monjas del internado donde está.

Una vez adoptado y en su nuevo hogar se dedicará hacer perrerías a los del vecindario y a su abuelo, a la vez que se cartea con un peligroso criminal que se escapa de la cárcel, llamado el asesino de la pajarita.

Este chico es un demonio, John Ritter
El director de todo esto es Dennis Dugan, que algunos recordarán de salir como actor en Un astronauta en la corte del rey Arturo de la factoría Disney y en Aullidos. Aunque ha sacado más partido en su faceta como director: Beverly Hills Ninja, la salchicha peleona, aunque ahora se dedica a rodar casi todas del Adam Sandler: Un papá genial, Zohan. Licencia para peinar, Niños grandes y Sígueme el rollo.

Los que estaban detrás del guión eran Scott Alexander y Larry Karaszewski, que después acabarían especializándose en biopics con el Ed Wood de Tim Burton (que en un principio tenía que haber sido dirigida por Michael Lehmann), El escándalo Larry Flint y Man on the moon.

En un principio el guión era bastante más adulto y con mucha más mala leche, pero al acabar siendo producido por la Universal se acabó suavizando mucho hasta convertirlo en una película bastante familiar.

Este chico es un demonio, John Ritter

Entre los actores teníamos al eterno John Ritter, que vuelve hacer su clásico papel de palurdo), Jack Warden, la guapa de Amy Yasbeck (que años después serían mujer de Ritter en la vida real), Gilbert Gottfried, nuestro querido Michael -Kramer en Seinfeld- Richards haciendo de asesino de la pajarita, Michael Oliver haciendo de Junior, y un cameo del director, Dennis Dugan, que hace del padre del niño que compra una cantimplora.


Como he comentado antes Este chico es un demonio a perdido muchísimo con los años, acabando como carne de las sobremesas dominicales de Antena 3. Pero pese a todo hay que darle, como mínimo, un primer visionado para ver las perrerías de Junior, que es capaz de tirar a su abuelo por las escaleras para birlarle la cartera, destrozar la fiesta de cumpleaños de una vecina (petardos en lugar de velas, mogollón de porquería en una piñata, una rana en el ponche...), hacer fotos a las monjas mientras se cambian y están en el lavabo... resumiendo, un montón de cabronadas, que si lo piensas son la mar de incorrectas para una producción familiar, que como mínimo te sacan algunas risas.
Y no puedo olvidarme del espléndido doblaje de Junior a cargo de Eloísa Mateos, que todos recordaremos por ser la voz de Chicho Terremoto, y que lo borda dándole al niño un aire más cabroncete.

Este chico es un demonio, John Ritter

Este chico es un demonio, John RitterLa película fue un éxito de taquilla que nadie se esperaba, recaudando más de 50 millones de dólares. Evidentemente esto tendría que repercutir en secuelas. Así fue un año después que se estrenó Este chico es un demonio 2, dirigida por Brian Levant, director primerizo que luego acabó detrás de películas familiares de corte amable como Beethoven, uno más en la familia, Los Picapiedra y su secuela o Un padre en apuros.
La secuela, también guionizada por Alexander y Karaszewski, que continua allá donde termina la primera, es repetir la fórmula pero añadiéndole más chicha, en este caso con una hermanastra tan o más cabrona que Junior, que, junto a su padre (de nuevo Ritter) acaba en un nuevo barrio donde una vecina intenta ligárselo.
La película, que costó más que la primera y recaudó menos, pero lo suficiente para no matar la saga, es un cúmulo de escenas grotescas llenas de vomitados y ensaladas repletas de cucarachas.

Ya en 1993 aparecería la serie de dibujos animados. Serie de apenas dos temporadas que era una coproducción entre USA, Canadá y ¡tachán! Spain, con nuestros amigos de D'Ocon por en medio.

Y, ¡por fin!, a mediados de los 90 llegaría el último coletazo de la saga con Este chico es un demonio 3 directamente para le mercado doméstico. Aquí ya no repetiría nadie de las dos anteriores salvo Jack Warden (el abuelo), y con William Katt haciendo de padre de Junior.
La película es un bodrio infumable, donde lo único que me hizo gracia (más que nada por lo absurdo que es) es un gag donde Junior encierra a su abuelo en un armario y después de media película o más vuelve aparecer saliendo de un agujero en el jardín que él mismo ha cavado para escapar de su prisión.

2 comentarios:

alcorze dijo...

Uff, esta a mí no me gustó ni en aquellos tiempos. Menudo paquete le tenía tanto a la peli como al crío ese XD

Un saludo!

J. Jara dijo...

¡Pues menos mal que no has visto las secuelas!