mandó que levantaran su cúpula señera:
allí donde discurre Alfa, el río sagrado,
por cavernas que nunca ha sondeado el hombre,
hacia una mar que el sol no alcanza nunca.
Así comienza el famoso poema que Samuel Taylor Coleridge escribió después de haberlo soñado tras consumir alguna sustancia psicotrópica. Aunque realmente, Xanadú era un palacio de ensueño dedicado a los placeres mundanos construido por Kubilai Khan, situado en la antigua Mongolia. Pero vamos a lo que nos interesa, vamos hablar de Xanadú, la película, el porqué no es el bodrio que algunos intentan vender, como se maquinó, como la productora tuvo que cambiar el rumbo de la campaña publicitaria al verla acabada y cualquier otra chorrada que se me pase por la cabeza.
A finales de los años 70 hay una fiebre de las discotecas de patines en los USA y a eso hay que añadirle el (falso) auge que tuvo el género musical con Grease a la cabeza y otros engendros de dudosa calidad y de éxito volátil como Can't Stop The Music. Así es como comenzó a germinar el proyecto de Xanadú. Lawrence Gordon y Joel Silver (sí, sí, el de Arma letal y Matrix) comienzan a desarrollar el proyecto para la Warner. La película tenía que ir por esos derroteros de discotecas de patines que antes comentaba, pero al poco de comenzar los preparativos, nuevas producciones sobre el tema aparecieron en el panorama como La fiebre del patín (Skatetown USA, 1979) de William A. Levey con Scott Baio y Patrick Swayze o Roller Boogie con Linda Blair. A partir de ahí Gordon y Silver deciden dar un cambio a la historia y enfocarla más hacía un estilo romántico, pero la Warner pierde el interés y cancela el proyecto. Los productores se dedican a mover el proyecto por otras productoras hasta que consiguen endosárselo a la Universal.
Una vez que la nueva major apuesta por el proyecto y la historia comienza a estar perfilada, es cuando entra en escena Olivia Newton-John, que acepta después de leer una sinopsis de escasas 20 páginas (luego veremos como nunca existió un guión definitivo, habiendo más de 13 versiones diferentes durante el rodaje del film) que por aquella época ya era tomada como una nueva versión de La diosa de la danza (Down to Earth, 1947) con Rita Hayworth.
Olivia Newton-John que, pese a ser inglesa de nacimiento (país que representó en Eurovisión, donde incó la rodilla ante Abba), se crió en Australia, donde consiguió gran tirón como cantante. Olivia, que ya había hecho hecho sus pinitos en la gran pantalla y tocó la gloria con Grease, se aseguró la jugada colocando a su noviete de la época y manager, Lee Kramer, como productor ejecutivo de la película. El siguiente paso fue buscar una estrella consagrada, a poder ser en el genero musical. Ahí aparece Gene Kelly (no confundir con la actriz porno Jill Kelly) que, como él mismo reconoció, no sabía donde se metía. Hay que decir que pese a haber seguido trabajando en alguna serie y cosas por el estilo, Xanadú fue la última película de Kelly, que por aquella época ya contaba con 68 años y un delicado estado de salud. En una de las versiones que existió del guión se habla de una musa de avanzada edad, ésta hubiera servido de comparsa al bueno de Kelly.
Para el tercero en discordia se escogió a Michael Beck, viejo conocido de Gordon y Silver ya que fue el protagonista de The warriors (1979), su anterior producción. Y para dirigir todo el entuerto se contrató al desconocido Robert Greenwald, que sólo había trabajado en tv y que, actualmente, se ha especializado en documentales bélico-políticos. Hace tres años estrenó el documental Al Descubierto: Guerra en Iraq, e incluso podemos estar al tanto de su "maravillosa" vida a través de su blog.
Para el tercero en discordia se escogió a Michael Beck, viejo conocido de Gordon y Silver ya que fue el protagonista de The warriors (1979), su anterior producción. Y para dirigir todo el entuerto se contrató al desconocido Robert Greenwald, que sólo había trabajado en tv y que, actualmente, se ha especializado en documentales bélico-políticos. Hace tres años estrenó el documental Al Descubierto: Guerra en Iraq, e incluso podemos estar al tanto de su "maravillosa" vida a través de su blog.
Beck, Newton-John y Kelly
Se estaba cociendo un musical, así que era evidente que había que cuidar mucho el aspecto sonoro. La jugada fue contratar a John Farrar y a Jeff Lynne, o lo que es lo mismo, a la ELO (Electric Light Orchestra).
John Farrar era una pieza importantísima en la carrera de Olivia Newton-John, ya que se encargó de escribirle y producirle algunos de sus más famosos hits (sic) además de escribir algunas canciones de Grease, sin ir más lejos Hopelessly Devoted To You fue nominada al Oscar. Por su parte, Jeff Lynne era el líder de una de las bandas más importantes de la época, la ELO.
John Farrar, Newton-John and Kelly
En un principio Farrar debía escribir las canciones de Olivia mientras que Lynne se encargaría del resto de la banda sonora. Pero este último se negó a esto y acabó firmando algunas canciones de nuestra rubia amiga.
2 comentarios:
Acabo de ver los logos que has hecho para Pi es 3 y Aratz one step beyond, que has puesto en la pagina de Marsupial Productions. Estan muy chulos, el de Pi me ha gustado mucho (te lo pillare para ponerlo en el blog) y el dibujo veo que has respetado mucho la proporcion de mi oreja, igual de pequeña que la original ;) y las patillas y la perilla, jejeje me ha gustado mucho ;)
Me alegro de que te gusten, aunque te he de confesar que los hice deprisa, corriendo y mal. Ya sabes que puedes hacer un copy & past cuando quieras, estás en tu casa (porque evidentemente te conectas desde el ordenador de tu house o de tu job, es que estoy de humor finismo...). Una oreja es una oreja, pero le llaman orella... y les ponen mayonesa, sí tío, les ví bañarlas en esa mierda.
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