jueves, febrero 02, 2012
Vidocq
Eugène-François Vidocq fue el primer director de la Brigada de seguridad en la Francia de principios del siglo XIX. La vida de Vidocq es sumamente interesante. Desertó del ejercito después de golpear a un superior para evitar la pena de muerte; se convirtió en contrabandista y ladrón, amigo de las fiestas y prostitutas; pasó innumerables veces por la trena pero siempre acababa escapando; se reconvirtió en maestro en un pequeño pueblo, pero fue expulsado de él al propasarse con las alumnas; finalmente, a cambió de ser perdonado de todas sus penas, se convirtió en informador de la policía aprovechando sus contactos. Una vez dentro del sistema consiguió crear la Brigada de seguridad, formada en su mayoría por ex delincuentes. Finalmente, después de abrir una imprenta y publicar sus memorias, abrió la primera agencia privada de detectives.
Vidocq, el investigador más famoso de Francia es asesinado en manos del alquimista, una figura sobrenatural cuya máscara absorbe el alma de sus víctimas mientras mueren de miedo.
Etienne Boisset, un joven periodista que se hace cargo de la biografía del investigador, indagará sobre su último caso: la muerte de tres políticos a los que, curiosamente, les cayó un rayo encima.
Jean-Christophe Grangé, escritor de Los ríos del color purpura, de la que también se hizo cargo del guión cinematográfico, fue contratado por el productor-actor-guionista Dominique Farrugia teniendo carta blanca para escribir cualquier cosa, sin pensar en el presupuesto o la limitaciones técnicas.
Al encontrarse un guión con elementos fantásticos, los productores se pusieron en contacto con Pitof, que era conocido por crear los efectos especiales de las películas de Caro & Jeunet. En cuanto leyó el guión quedó convencido que esa era la película para su debut en la silla de director.
Su primer cometido fue retocar el guión, para luego pasarse a definir el concepto visual, para el que contactó con un viejo conocido, Marc Caro.
Como protagonista absoluto tenemos una excelente elección, Gerard Depardieu, que es calcado a los retratos que se conservan del auténtico Vidocq. También hay por ahí Inés Sastre, que más bien es Inés Desastre, porque la tipa sale muy mal parada en su actuación.
Recuerdo que en su estreno se habló mucho de su acabado visual, básicamente por ser una de las pioneras en estar rodada en formato digital y usar multitud de elementos añadidos en postproducción. Detalle que hizo que, en general, las críticas no fueran muy entusiastas.
Pero para el que disfrute con las películas de Sherlock Holmes (pero las buenas, las de Basil Rathbone o Peter Cushing, no las actuales) verá con muy buen agrado este film. Ya que todo el film tiene ese aspecto de film de misterio del estilo "adivina quien es el asesino", apoyado por su estilo visual sacado de la revolución industrial pero con cierto tufo gótico. Con algunos pecaditos (esas peleas post Matrix que son más caóticas que otra cosa) que se perdonan rápido en este entretenimiento puro y duro muy del estilo de las novelas baratas de mercadillo.
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6 comentarios:
Sólo la he visto una vez cuando salió a video. La recuerdo como una película que me gustó por su estética pero que no me acabó de convencer por su argumento. En cualquier caso era una buena opción para una tarde/noche de sesión de video.
Es que el argumento es muy simple. Pero por eso me gusta, es ingenuo como los relatos pulp.
Depardieu? pffff que pereza... si fuera Paquito Rabal ya es otra cosa
En la foto es clavado.
indiscutible
Una excelentísima película¡¡¡
(Gracias por recomendármela)
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