A finales de los 80 se ajuntaron Joel Silver, Robert Zemeckis, Walter Hill y Richard Donner, cuatro pesados pesados de Hollywood, para levantar Historias de la cripta. Luego, años después, algunos de ellos fundarían Dark Castle, productora especializada en films de terror (13 fantasmas, La casa de cera...).
Historias de la cripta, una serie de televisión donde cada episodio era una historia de terror que intentaba homenajear los antiguos cómics de la EC de los años 50. La serie salió mucho mejor parada que los Cuentos asombrosos de Spielberg en los 80. Además contó con un buen número de directores como Russell Mulcahy, Tom Holland, Tobe Hopper, Arnold Swarzeneger o los propios Zemeckis, Hill y Donner. Los actores que aparecieron tampoco eran menos modestos: Bob Hoskins, Tim Curry, Malcolm McDowell, Joe Pesci, Brad Pitt y un largo etcétera.
Allá por el 92 Zemeckis recibió un borrador para un episodio firmado por unos tales Fran Walsh y Peter Jackson, que en el aquel momento estaban preparando Criaturas celestiales, en el que se contaba la historia de un falso médium que iba estafando a la gente.
Al director de Forrest Gump le gustó la idea y se puso en contacto con los firmantes, pero no con la intención de que desarrollaran la historia para un capítulo de Historias de la cripta, si no para que convirtieran esas pocas páginas en el guión de un largometraje. El dúo comenzó a trabajar en el nuevo proyecto una vez finalizada Criaturas celestiales, allá por 1994. Un año después, Zemeckis y Universal daban luz verde al proyecto.
Jackson quería rodarla en Nueva Zelanda, cosa la cual Universal solo aceptó cuando consiguieron encontrar Lyttelton, una localidad que daba el pego como pueblecito americano. La siguiente imposición del director era que su compañía Weta Digital se hiciera cargo de los efectos. La compañía, que apenas había sido creada un par de años antes para encargarse de los efectos de Criaturas celestiales, no era muy del agrado de la Universal por su escasa experiencia.
Para convencer a Zemeckis, que apareció en el rodaje 2 semanas después de su comienzo, le prepararon una secuencia con los efectos integrados, que quedaron tan bien que el productor dio su visto bueno a que la Weta siguiera con los efectos.
Con un reparto la mar de completo: Michael J. Fox, Jeffrey Combs (si Fox se nota que es una elección de Zemeckis, Combs es descaradamente una apuesta de Jackson), Trini Alvarado (una mezcla de Andie McDowell y Julia Louis-Dreyfus), Jake Busey (el asesino de Identidad), Dee Wallace (la madre de E.T.), John Astin (el original Gomez de La familia Addams) o el clásico cameo de Peter Jackson; el film tardó casi 7 meses en rodarse (incluida la semana que se tuvo que cancelar después que Fox se torciera un tobillo), pese a la cantidad de problemas que tuvieron. Como el de darle vida a la muerte, (que acabó siendo una especie de versión previa de los Nazgul de El señor de los anillos) que pasó de ser un animatrónic, a una persona, pasando por un muñeco y finalmente siendo digital.
El guardián del cementerio, que parece el bebé de Braindead, acabó siendo eliminado del montaje final
Para más inri la Universal adelantó el estreno del film, pasando de Halloween del 96 a julio de ese mismo año, pensándose que tenían entre manos un blockbuster veraniego, capaz de competir con Independence day. Con lo que toda la fase de postproducción se tuvo que acelerar, teniendo que contratar a más técnicos digitales para poder acabar el film a tiempo.
Finalmente el film, que en un primer montaje llegaba a las dos horas y media, pasó con más pena que gloria en las taquillas y apenas recuperó los 30 millones que había costado.
El film tuvo el handicap, al menos en nuestro país, de su título, cuya traducción del original (The Frighteners) sería algo así como Los asustadores. Con Agárrame esos fantasmas el distribuidor se quedó a gusto, lástima que al público ese título le tiró para atrás, ya que daba cierto tufillo a comedieta infantilizada de Abbot y Costello y prefirió ver otras cosas. Curiosamente en USA pasó lo contrario, la famosa MPAA (la encargada de dar la calificación por edades en USA) le colocó un"menores acompañados" que prácticamente mató su carrera comercial, ya que esto daba la sensación que el film era extremadamente terrorífico.
Agárrame esos fantasmas es un film fallido. Está repleta de buenas ideas y cantidad de detalles: desde su estética otoñal, pasando por los fantasmas (maquillajes obra de Rick Baker), la banda sonora de Danny Elfman (que en cuanto vio Criaturas celestiales se ofreció a Jackson para trabajar con él) o unos actores la mar de solventes (pese a lo cargante que está Combs).
Con unos efectos digitales que, en su mayoría, han quedado bastante desfasados, la película naufraga en su conjunto, haciéndose repetitivo y dando esa sensación de guión alargado que hubiera lucido más en un episodio de 45 minutos para Historias de la cripta.
1 comentario:
el guardián del cementerio eliminado del montaje final, es un ninot, ¿no estaría Piquer Simón detrás de todo esto?
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